Fue asesinado por esbirros del gobierno adecopeyano, Rodríguez se caracterizó por su lealtad a los principios socialistas y su valentía para encarar las duras confrontaciones de la lucha política. Fue líder estudiantil en la UCV, activo luchador social en los barrios populares y Secretario general de la Liga Socialista. Detenido por la policía política, fue bárbaramente torturado en un intento por quebrar su consistencia revolucionaria.